20090924

Mafalda


Mafalda es una nena terrible, simpática y atrevida, que vive en la Argentina de mediados de los 60 y principios de los 70. Es nacida de una típica familia de Buenos Aires (porteña) de clase media.Esta niña, como todas, tiene una familia y unos amigos que forman su pandilla. Va a la escuela y, en verano, cuando le salen las cuentas a su papá, va de vacaciones. Pero Mafalda no es una niña como otra cualquiera. Humilde y comprometida con las etnias, le preocupa el mundo y no entiende como los adultos pueden llevarlo tan mal. Es famosa en el mundo entero por la gracia de sus preguntas, la inocencia de su mundo y la altura de sus ideales. Luchadora social incansable, emite manifiestos políticos desde su sillita con una inocente falta de inocencia. Puede decirse que es una revolucionaria más allá del lápiz y el papel. A través de Mafalda y su entorno, su autor, Quino (Joaquín Salvador Lavado), reflexiona sobre la situación del mundo y las personas que en él vivimos.

¿ Mafalda ciudadana ilustre de la Ciudad de Buenos Aires ?

Hubiese sido el primero, y casi con seguridad el único personaje de historieta en lograrlo. Pero a último momento tropezó con la zancadilla de una reglamentación injusta. Lo cierto es que la iniciativa existió: el 26 de octubre de 1988 llegaba al Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza para que Mafalda fuera reconocida como Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires. Con la firma del entonces intendente porteño, Facundo Suárez Lastra, y de su secretario de Cultura, Félix Luna, el proyecto se justificaba en que el personaje "simboliza lo mejor del espíritu de muchos jóvenes argentinos, que no se resignan a acatar el orden establecido y pretenden modificarlo y enriquecerlo con sus propias ideas. Mafalda hizo reflexionar muchas veces a sus lectores sobre la validez de los hábitos, creencias, prejuicios y lugares comunes, ayudando de este modo a construir una sociedad mejor". Y terminaba diciendo: "Mafalda sigue siendo, en la memoria colectiva de los argentinos, la chica preguntona, cuestionadora, irreverente e inesperada, que planteó en su momento tantos interrogantes molestos a la sociedad argentina".

La iniciativa no prosperó por una traba legal, ya que los concejales dijeron que el título honorífico sólo es para las personas. No se detuvieron a pensar que, al fin de cuentas, Mafalda es más humana que muchos seres humanos. Y como tal, tiene partida de nacimiento impresa en letras de molde. Sin embargo, el sólo intento de declararla ciudadana ilustre demuestra la importancia del personaje en la órbita cultural nacional.
Breve resumen de Mafalda en el exterior

Mafalda es el personaje más relevante y popular de la historieta argentina en el exterior de su país. Pocos personajes han logrado obtener tal popularidad e inserción en culturas muchas veces antagónicas.

En el año 1966 Mafalda comienza a traspasar las fronteras, al publicarse en varios diarios de Uruguay. En 1968 Mafalda llega a Europa y es traducida por primera vez a otro idioma: el italiano; treinta tiras son incluidas en una antología de textos literarios y dibujos humorísticos, publicado en Milán, que se titula "Libro dei Bambini Terribili per adulti masochisti", con un dibujo de ella en la tapa del libro. En 1969, debido al éxito de Mafalda en la antología mencionada, aparece en Italia el primer libro que recopila sus tiras, con el título "Mafalda, la contestataria" y con un prólogo sin firma, pero que ha escrito Umberto Eco.

En 1970, en España, se lanza el primer libro de Mafalda y la censura del gobierno franquista obliga a los editores a ponerle una franja en la tapa que dice "para adultos". En 1972, en Finlandia se publican 3 libros de Mafalda, aunque sin mayor éxito. En 1973 aparecen los primeros libros de Mafalda en Francia y en Alemania. En 1977, en México se inicia la edición de libros de Mafalda. En 1978 se publican los libros de Mafalda en Grecia (derecha). En 1979, se edita, en Francia, el primer libro de Mafalda a color. En 1981, en Holanda, se publican dos libros de Mafalda. También en el año 1981 comienza a publicarse en Barcelona (España), en catalán. En 1982, en Brasil, se publican sólo tres libros de Mafalda.

También en 1982 una comunidad de uruguayos residente en Suecia publica la colección completa de Mafalda, en 12 libros. En 1984, se edita, por primera vez, Mafalda en gallego (fueron cuatro libros). En 1986 aparece por primera vez en Estados Unidos, en una recopilación de chistes gráficos, con el título de The World of Quino. Ese mismo año, Mafalda es la protagonista de una campaña publicitaria para promover las primeras elecciones de los Consejos Escolares en España, y tanto en Dinamarca como en Noruega, se publica un libro de Mafalda. En 1990, en Taiwán, se publican ediciones piratas de Mafalda en idioma chino, que al cabo de dos años regularizan la situación (izquierda).

En 1992 se publica en España, por primera vez en castellano, "Toda Mafalda". Con posterioridad, y recopilada en varios libros, la historia de los nueve personajes que compusieron la tira se sigue reeditando y logra atrapar públicos de diversos países como Italia, España, Portugal, Brasil, Noruega, Dinamarca, Grecia, Holanda, Finlandia, Francia, Alemania y Estados Unidos. Aunque, curiosamente, recién en 2004 se editaría la primera edición de Mafalda integramente en idioma inglés, las tiras ya se tradujeron, a la fecha, a cerca de 40 lenguas distintas (haciendo click en la imagen de Mafalda de la derecha podrá ver una tira en idioma francés). Así, en el año 2007 se publicó por primera vez en Japón; fue un libro de 174 páginas denominado "Mafalda: ¿Quién es malo?", con una selección de viñetas (click aquí).


NOTA: En el año 1993, el grupo chileno de rock "Sexual Democracia" publicaría, en su álbum "Sudamérica Suda", un tema musical sobre el popular personaje de Quino, denominado, precisamente, "Mafalda".
LA PLAZA "MAFALDA"

El 28 de noviembre de 1995 se inauguró, en la manzana delimitada por las calles Concepción Arenal, General Martínez, Conde y Santos Dumont, en el barrio de Colegiales, de la Ciudad de Buenos Aires, la "Plaza Mafalda", como una forma de honrar al popular personaje en un lugar público y de esparcimiento. Casi 10 años después, en Agosto de 2005, el gobierno porteño remozó el espacio verde, caracterizando el paseo con los inolvidables personajes de Quino. La idea original era recrear a Mafalda con esculturas de resina epoxi, pero Joaquín Lavado (Quino), el creador del famoso personaje de historieta, se opuso a que las mismas se realizaran, ya que no deseaba ver a su personaje en versión tridimensional o dibujado sobre colores que no fueran primarios. Así fue como el autor prefirió aportar sus propias viñetas, y encargó a Julieta Colombo, su representante en el país, para que supervise las tiras más adecuadas a reproducir. Es por eso que todas las imágenes de la tira Mafalda que tiene la plaza son planos, y no hay muñecos o esculturas.
CLICK PARA AGRANDAR

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Cualquiera que visite el lugar observará que no se trata de una plaza tradicional, ya que la imagen y las ocurrencias de Mafalda y sus amigos se reproducen en bancos, juegos infantiles y carteles, para arrancarles una sonrisa a chicos y grandes. Esto se hizo bajo el "Programa de Caracterización de Espacios Verdes" de la Secretaría de Cultura del gobierno porteño. La Dirección General de Espacios Verdes, por su parte, encaró la reparquización de la plaza, y la pintura y el acondicionamiento de los juegos infantiles. Parte de los trabajos de infraestructura incluyeron la colocación de grandes paneles de cemento, donde los artistas reprodujeron situaciones magistrales de Mafalda y su pandilla.

En una de las imágenes, Mafalda, inseparable de su radio, escucha: "Hizo el Papa un nuevo llamado a la paz". Enseguida, con su habitual irreverencia agrega: "Y le dio ocupado como siempre, ¿no?". En otra, Mafalda se sube a un banco y vocifera: "Quiero felicitar a los países que conducen la política mundial". Luego, reflexiva, sentencia: "Así que espero que alguna vez haya motivos". La voz de los vecinos también se hizo presente: votaron, a través de la página web del gobierno de la ciudad, la viñeta que, a su criterio, no podía faltar en un homenaje a Mafalda, y ésta se reprodujo en un espacio especial junto con un mensaje a Quino que reza: "Nos enseñaste a pensar en clave humorística y crítica a varias generaciones. Tus personajes nos llegaron al corazón y nos sirvieron en la resistencia. Por tu lucidez y honestidad, seguimos sonriendo aún en los momentos más difíciles. Por todo esto nos comprometemos a que las próximas generaciones conozcan tu obra y la disfruten, sea cual sea el mundo que nos toque, que no es poco".

La plaza fue reinaugurada el domingo 21 de agosto de 2005 con la presencia, entre otros, de Quino, el jefe de gobierno porteño y el Secretario de Cultura. Y tal como lo imaginó Mafalda en un sueño, el grupo The Shouts, que personifican a los Beatles (el grupo musical favorito del personaje), descendió de un Citroën (como el que tenía el papá de la niña), esta vez para entonar las melodías del cuarteto, soltar globos con mensajes de paz y leerle una carta abierta a Quino, quien fuera declarado ciudadano ilustre de la ciudad. El parque fue sectorizado en siete zonas (son siete triángulos que unen sus vértices en el centro de la manzana), bautizadas con carteles que lucen las imágenes y los nombres de Felipe, Susanita, Miguelito, Libertad, Manolito, Guille y Mafalda. En el anverso, se describen las señas particulares de cada uno, para familiarizar a las nuevas generaciones con los personajes.

Cuatro artistas plásticos pintaron en distintos sectores, bancos y juegos de la plaza las viñetas de la tira creada por Quino en 1963, traducida a 12 idiomas y publicada en 26 países. Pero lo más impactante es un nuevo mirador con terraza, sobre el cual se dibujaron una rayuela y la silueta de Mafalda (la figura está sobre un fondo oscuro), cosa que se puede advertir desde balcones y terrazas. Sobre otros carteles de la plaza, la niña de siete años, fiel defensora de la paz, los derechos humanos y la democracia, alecciona sobre derechos de los niños y enuncia las pautas ecológicas básicas que deben ser respetadas. Por otra parte, los vecinos de Colegiales aplaudieron la iniciativa de la Secretaría de Cultura porteña de ver la sabiduría de Mafalda plasmada en la plaza de su barrio. Además, fue una forma de rendir un tributo al valiosísimo trabajo de Quino.

Mafalda en el Subte (Extractado del diario “La Nación” del 31/08/08)

Mafalda y los personajes de Quino llegan al subte
Los pasajeros que viajan en subte por la Ciudad de Buenos Aires y atraviesan el pasaje que conecta la estación Perú de la línea A con la estación Catedral de la línea D tendrán pronto una grata sorpresa: la de encontrarse a diario con Mafalda y sus amigos. Será cuando se inaugure el enorme mural, de 15 metros de largo por uno y medio de alto, que hoy está en plena preparación en los talleres de Metrovías. La tira de Quino toma vida en más de 400 baldosas de 20 por 20 centímetros que un grupo de artistas pinta y hornea. El proceso es el siguiente: las tiras de Quino se dividieron en más de 400 cuadraditos, una por cada baldosa. Luego se numeró y se copió el dibujo en cada una de las cerámicas. Los contornos se dibujan en cuerda negra y se pintan con una mezcla de pigmentos cerámicos y aceites vegetales. Unas cinco horas de horno a mil grados y ya quedan listos para ser colocados. El "rompecabezas" de las cerámicas se empaqueta en orden para ser después rearmado en la estación.

La escultura de Mafalda

El Domingo 30 de Agosto de 2009 fue inaugurada en la esquina de las calles Chile y Defensa, de la Ciudad de Buenos Aires, una escultura de Mafalda, el más popular y famoso de los personajes de Joaquín Salvador Lavado (Quino). Ahí, a pocos metros del edificio donde vivía su creador, y de donde se inspiró para ambientar la historieta más popular, se instaló la estatua de Mafalda sentada en un banco de plaza. En un acto organizado por el Programa Puertas del Bicentenario del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el genial dibujante fue el gran homenajeado de la ceremonia, y se mostró emocionado cuando se descubrió la pequeña escultura, de 80 centímetros de alto, realizada por el artista Pablo Irrgang. Mafalda aparece, en una obra que promete convertirse en destino imperdible para vecinos y turistas que recorran el barrio de San Telmo, con un vestido verde y su inconfundible cabellera (click en la imagen de la derecha).



En el acto de la inauguración el autor se sentó junto a Mafalda y le acarició su cabeza, mientras sus admiradores tomaban fotos con cámaras y celulares. La calle donde se descubrió la obra estuvo desbordada de público, entre vecinos, curiosos, amigos del dibujante, autoridades y muchísimos fanáticos. En el acto también se le entregó a Quino una pequeña escultura de Mafalda y, además, la primera medalla del Bicentenario, tributo que se entregará a 200 personalidades e instituciones."Estoy muy emocionado y tan abrumado que no se qué decir. Tantas muestras de afecto, de cariño... Verme rodeado de todo esto me apabulla muchísimo. Siempre he expresado todo lo que sentido a través del dibujo, a través de la palabra me cuesta más", señaló Quino. Poco después de descubrió una placa en la entrada del edificio de la calle Chile 371, con un dibujito de la precoz niña y la frase "Aquí vivió Mafalda", justo donde hace más de 40 años, Quino creó a todos los personajes de la tira.

20090917

A 36 años del golpe genocida en Chile


Por latitud 51 - Tuesday, Sep. 08, 2009 at 8:31 PM


Articulo de Socialismo o Barbarie Internacional

Socialismo o Barbarie

Haciendo memoria - A 36 años del golpe militar en Chile (2ª parte)

Las Fuerzas Armadas consuman el golpe

Por Oscar Alba
06/09/09


A fines de la década del 70 la situación política chilena estaba caracterizada por una aguda polarización de la lucha de clases. En marzo 1969, en las elecciones parlamentarias, los partidos obreros aumentaron levemente su caudal electoral y la Democracia Cristiana gobernante disminuyó significativamente sus votos. Será el Partido Nacional quien mostrará un apoyo electoral renovado al captar a sectores de la clase media, descontentos con el gobierno de Eduardo Frei.

Con las candidaturas de Jorge Alessandri del Partido Nacional, Radomiro Tomic por la DC y Salvador Allende por al Unidad Popular (UP) el régimen chileno se encaminó hacia las elecciones del 70. Pero el camino lectoral siguió sembrado de convulsiones sociales y políticas. El 21 de octubre, el General Roberto Viaux Marambio produjo una asonada militar golpista. Fue en el Regimiento de Tacna de Santiago y aunque sus protagonistas declararon que era un movimiento por reivindicaciones a la cúpula del ejército, no había dudas que se trataba de una reacción militar frente al avance de las luchas y la influencia creciente de la izquierda entre los trabajadores. El presidente Frei declaró que no se movería del gobierno. Pero la CUT llamó a un paro general por tiempo indefinido y obreros y sectores populares rodearon al regimiento y al día siguiente se llegó a un acuerdo con los golpistas.

La movilización obrera había inclinado la balanza a favor y salían fortalecidas. La UP, creada unos días antes del intento de golpe, capitalizará este triunfo contra los golpistas en su perspectiva electoral. El 21 de enero Allende será proclamado candidato presidencial de la Unidad Popular. El semestre anterior a las elecciones será escenario de un recrudecimiento de las luchas obreras y campesinas. "Enero de 1970 se inició con paros en las grandes industrias de Sumar y Fensa y con una dramática "marcha del hambre" de los mineros de Ovalle. En febrero los obreros ocuparon la fábrica de fideos Carozzi, paralizaron los obreros del cuero y del calzado y decenas de miles de obreros jubilados se movilizaron en todo Chile para exigir una aumento en el pago de sus miserables pensiones. La lucha campesina paralelamente en las provincias de Curicó, Nuble y Magallanes. En marzo paralizaban los trabajadores de los puertos, las tomas de los fundos se extendían en Coquimbo y en O'Higgins y estallaba la huelga del salitre" (1) Los Comités de la Unidad Popular se habían extendido en todo el país.

El triunfo electoral de la Unidad Popular y el gobierno de Salvador Allende

El 4 de septiembre se llevaron a cabo las elecciones nacionales y Allende logrará el primer lugar, seguido del candidato de la derecha, Jorge Alessandri, Radomiro Tomic (DC) quedará tercero. Y el Congreso tendrá que resolver ya que Allende no logra la mayoría absoluta. La tensión política se profundizó. La burguesía chilena debatía si impedían la asunción de Allende, ya sea a través del Congreso o por medio de un golpe militar. Comenzaron atentados terroristas de la derecha y poco días antes de la sesión del Congreso fue baleado el comandante en jefe del Ejército, René Shneider, quien va a morir unos días después. Finalmente, la Democracia Cristiana exigió a Allende respetar "las garantías democráticas" para respetar el resultado electoral. Esto permitió a la Unidad Popular llegar al gobierno. No obstante, la derecha siguió conspirando, a instancias del imperialismo yanqui contra el nuevo gobierno.

Con Allende en el gobierno, la Unidad Popular comienza a llevar adelante una serie de reformas importantes. En el terreno latinoamericano, a poco de asumir, Allende reanudará relaciones diplomáticas con Cuba y dejará de pagar la Deuda Externa. Y las primeras medidas a nivel nacional serán un aumento salarial del 35% y hacia fines de 1970 la estatización de los bancos a través de las compras de sus acciones pero no de su expropiación. En julio de 1971, el gobierno nacionaliza el cobre y posteriormente las minas de carbón y la Corporación de Aceros del Pacífico. En el campo se profundiza la reforma agraria que había planteado el gobierno anterior de Frei. "En 20 meses de gobierno se registraban ya más de 2500 fundos expropiados, entre ellos uno de los más grandes del mundo (520.000 has.)" (2)

Cada medida del gobierno provocaba una mayor demanda de los trabajadores que sentían al gobierno como suyo y, por otro lado, la reacción de la burguesía, que veía, en las fábricas y el campo, más que en el parlamento; que sus intereses estaban en peligro.

En el programa de la UP la economía chilena se dividía en tres sectores o áreas: social. privada y mixta. En el área social se agrupaban las empresas estatales ya existentes junto con la incorporación de un pequeño grupo de empresas. En el área mixta el Estado controlaba la mayor parte de las acciones y la privada. Es decir el programa político de la UP desde su génesis no contemplaba la expropiación total de la burguesía y en los hechos, a pesar de las profundas reformas económicas, la burguesía y las empresas multinacionales mantendrán el margen necesario para comenzar a boicotear y provocar el caos en la economía chilena.

El mercado negro fue una de las consecuencias de esta política ya que la patronal comenzó a desabastecer los almacenes y para adquirir productos básicos como, por ejemplo, el arroz y la harina, había que pagar precios carísimos.

En octubre de 1972, los dueños de camiones dirigidos por León Vilarín van a declarar un paro que paralizó la actividad en el país con el objetivo de desestabilizar al gobierno. Allende en lugar de llamar a la movilización hasta aplastar el paro patronal patronal negoció y a principios de noviembre, nombró al comandante Carlos Prats ministro del Interior.

Se profundiza la polarización entre las clases

El 4 de marzo de 1973, a pesar de la crítica situación, la UP logra una nueva victoria electoral con el 43 % de los votos. Este triunfo en las urnas, lejos de utilizarlo para llamar a la movilización obrera contra la derecha golpista, el gobierno lo utiliza para mantener su política reformista y la ilusoria "vía pacífica al socialismo"

Mientras tanto los trabajadores continuaban ocupando fábricas y tierras. Así comienzan a surgir los Cordones Industriales que agrupaban a fábricas de distintas zonas. Estos Cordones no sólo ejercían el control obrero en las fábricas sino que controlaban el abastecimiento, requisando almacenes y depósitos donde las patronales acaparaban mercaderías. En estas regiones se expresaba con toda crudeza la situación política chilena. Cuando los obreros ocupaban las plantas fabriles el gobierno enviaba a los carabineros para desalojarlas y sucedían enfrentamientos entre obreros y carabineros.

Los Cordones Industriales comienzan a ser una alternativa a la CUT, que respaldaba la política reformista de Allende y un germen de poder obrero. "Las movilizaciones que hacen en los Chile los Cordones Industriales son fuertes. En Vicuña Mackenna movilizamos 5000 a 7000 trabajadores en cada movilización y caen tres o cuatro muertos. Porque la fuerza en estos momentos está en los Cordones Industriales y no en la CUT" Así se expresaba Armando Cruces, presidente del Cordón Vicuña Mackenna, que agrupaba a 350 empresas, en una entrevista publicada en Avanzada Socialista en agosto de 1973 (3) La mayor parte de los obreros de los Cordones Industriales habían votado a Allende pero comenzaban a ver que el gobierno en lugar de profundizar las medidas hacia el socialismo se inclinaba a acordar con los partidos burgueses. La derecha y la democracia Cristiana van a aprovechar el "diálogo" que les proponía la Unidad Popular para organizar el aplastamiento de la movilización obrera.

El 29 de junio se produce otro intento de golpe que fue conocido como el "tancazo" Ante el mismo lanza un discurso ambiguo: por un lado llama a los trabajadores a que tuvieran confianza en las Fuerzas Armadas y Carabineros y por otro, que estuvieran prestos para defender y combatir junto a "los soldados de Chile" (4) Pero los "soldados de Chile" no son otros que los que comandaba el general Augusto Pinochet Ugarte, designado por el propio Allende al frente de las Fuerzas Armadas. Consecuente con su política conciliatoria, en lugar de movilizar a las masas contra la reacción burguesa, Allende va ampliar su gabinete de gobierno dando lugar a las Fuerzas Armadas y la oposición burguesa. Mientras que los trabajadores reclamaban terminar con la derecha golpista, "Chicho" Allende retrocedía haciéndole concesiones políticas.

El 11 de septiembre las Fuerzas Armadas chilenas consuman el golpe

Allende, reformista consecuente va a pegarse un tiro en el Palacio de la Moneda antes de entregarse. Su actitud va a expresar la impotencia de llevar adelante la " vía pacífica al socialismo" conciliando con los explotadores.
Los obreros de los Cordones Industriales enfrentarán decididamente a los golpistas que bombardearon las fabricas y las barriadas obreras, pero no podrán impedir que su confianza en la dirección política de Allende y el Partido Comunista los lleve a la derrota. La experiencia del gobierno de la Unidad Popular en Chile, a más de tres décadas, no puede perderse en el olvido.
Sólo la conquista de la independencia política de los trabajadores, la construcción de un partido obrero revolucionario sobre la base de un programa que liquide la explotación capitalista imperialista, superando las fronteras nacionales abrirán la posibilidad de un triunfo revolucionario.

(1) Labarca Godard, Eduardo, Chile al rojo. Ediciones de la Universidad técnica del Estado, Santaiago, Chile. 1971

(2) Hugo Sacchi, Allende. La Unidad Popular de Chile

(3) Avanzada Socialista, periódico del Partido Socialista de los Trabajadores de Argentina

(4) Discurso de Allende, citado en Revista de América, noviembre de 1973

(Fuente: Indymedia)

20090912

"La noche de los lápices"


Bajo la dictadura de Videla, hubo en Argentina 30.000 detenidos-desaparecidos. En esta cifra hay edades que van desde los 12 a los 76 años. Aunque el grueso de la misma se conforma entre los 20 y los 35 años.

El dictador Videla, dos meses antes del golpe, en una reunión de Comandantes en Jefes realizada en Uruguay, dijo: ”En Argentina correrá toda la sangre que tenga que correr para salvar las instituciones”.

Ya en el país, agregó: ”Nosotros no cometeremos la torpeza de Pinochet, en Chile, que mató mucha gente, ni la de Bordaberry en Uruguay, que encarceló a medio país. No, aquí en Argentina, no habrá ni muertos ni presos, aquí habrá desaparecidos”.

Bajo el régimen de Videla, el gobernador de la ciudad de La Plata, el Gral. Saint Jean, en una entrevista al diario inglés The Guardian, en una frase que dio vuelta al mundo, explicando los alcances de la represión ilegal, dijo: ”primero eliminaremos a los subversivos, después a sus cómplices, luego a sus simpatizantes, por último a los indiferentes y a los tibios”1.

Desde que se implantó la dictadura, el objetivo fue el aniquilamiento del opositor; para ello se instalaron en todo el país centros de detención ilegales, dado que el destino final era el exterminio, los cuales tomaron características de verdaderos campos de concentración, en donde se llegó a comprobar la existencia de hornos crematorios.

Los jóvenes de la película en cuestión (*), fueron secuestrados en la ciudad de La Plata -capital de la provincia de Buenos Aires-, ciudad universitaria por excelencia; con sus centros de ciencias e investigación; con su alumnado revoltoso y rebelde corriendo en las manifestaciones. Eran tiempos que soñábamos y queríamos un Chicho Allende como presidente, y en los ministerios de Economía y Educación, un Che Guevara y un Pablo Freire. Ciudad de la Plata, esa hermosa ciudad, con su cordón fabril, que la abraza desbordándola de obreros, esa ciudad que por su espíritu vivo es dueña de una gran belleza, y por su simetría perfecta, en su trazado, fue llamada la ciudad de las diagonales. Que en una paradoja de la otra cara de la moneda, alberga hoy, un muerto por cuadra. La ciudad que concentra y administra toda la provincia, donde tiene su cede la policía provincial, llamada por lo bajo: “la feroz bonaerense”. En ese tiempo el jefe de la policía de la ciudad era el Gral. Ramón Camps, y su brazo derecho el comisario torturador Miguel Osvaldo Echecolatz. Algunas dependencias policiales fueron convertidas en campos clandestinos de detención. Ellos les dieron el nombre de pozos: “Pozo de Banfield”, “Pozo de Quilmes”, “Pozo de Arana”, “Pozo El Vesubio”, “Pozo Coti Martínez”, “Pozo Puesto Vazco”, “Pozo El Sheraton”, “Pozo La Chacha”. Estos pozos estaban subordinados al esquema militar de Camps1. Se denominaban pozos porque eran cárceles subterráneas construidas debajo de los cuarteles policiales. Celdas que más parecían mazmorras.

El Gral Camps en la época posterior al golpe del 76, en Madrid, en una entrevista al semanario español Tiempo, se adjudicó personalmente la desaparición de 5.000 personas. En aquella oportunidad dijo: “a algunas de ellas, yo les di sepulturas en tumbas n.n. (no nato)”, señala que los 5.000 desaparecidos bajo su mando están muertos, califica como útiles las desapariciones, aunque considera, que no desaparecieron personas, sino subversivos, y agrega, “hubo que liquidar bastantes periodistas, porque difundían en los medios de comunicación posiciones que atentaban contra la institucionalización vigente”, insiste que “los militares, aplastamos la subversión en el campo militar, aunque en el terreno político, creo que los perdedores hemos sido nosotros, con nuestra blandengería”2.

Cuando vino la democracia en 1983, este general fue detenido en el regimiento tercero de infantería de La Tablada. Allí llegaban sus pares y también los civiles de ultra derecha a consolarlo. El les dijo: “A los desaparecidos de la próxima vez, no se los llamará n.n., sino m.m. (muchos más).

Pero estos generales no triunfaron, porque unidos a todos los que colaboraron con este régimen, se llevarán nuestro más profundo desprecio de todas las personas honestas y progresistas.

La situación de Videla con respecto a la cultura y educación lo llevó junto con el Gral. Viola -el cual sería su sucesor como presidente-, a elaborar unas órdenes secretas que ellos bautizaron “Operativo Claridad”, un eufemismo de su represión clandestina. Lo moldearon junto con el ministro de Cultura y Educación, el católico y derechista Bruera; y este grupo de inteligencia encubierta funcionaría con el nombre de “Recursos Humanos”, que tenía como tarea realizar espionaje dentro de los colegios estatales y privados, elaborar listas negras, obligar a los rectores y docentes a delatar a los sospechosos de ser opositores del régimen. Una vez determinado el grado de peligrosidad proceder a su expulsión o secuestro3. El organismo mencionado pasaba información a los grupos de tareas compuestos por militares, policías y civiles de ultra derecha, que eran las bandas paramilitares llamadas patotas. El secuestro y desaparición de los jóvenes de este tema, son consecuencia directa de esa política.

Fue el Gral. Camps, quien bautizó este operativo con el nombre de “La noche de los lápices”, con una destacada creatividad criminal, porque aludía a estudiantes secundarios que iban a ser secuestrados en esa madrugada4.

Estos jóvenes desaparecidos estuvieron encapuchados y engrillados en dos dependencias pertenecientes directamente bajo la dirección de la policía de la provincia de la ciudad de La Plata: División de cuatrerismo, donde funcionó el campo clandestino, o de concentración, llamado “Pozo de Arana”, y después, en la brigada de investigaciones de Banfield, llamado “Pozo de Banfield”, en donde se reconoció a uno de los torturadores, el comisario Echecolatz5.

Estos generales en su espantosa y animalada política, como todos los ejércitos latinoamericanos, recibieron adiestramiento antisubversivo en las escuelas de contrainsurgencia que los yanquis tenían en Panamá. Históricamente, estuvieron asesorados por ex-nazis, además, recibieron cursos de prácticas de torturas de los franceses veteranos de la intervención en Argelia y asimismo, como del Mosad -servicio de inteligencia israelí-. En su algarabía criminal se levantaron desde el Cono Sur como los luchadores de las espadas más largas de Latinoamérica, en una tercera guerra mundial, que ellos librarían a mansalva contra el comunismo internacional.

Estos fascistas les cayeron a los estudiantes platenses en una madrugada. Los muchachos eran nueve jóvenes de entre 14 y 18 años. Cuando iniciaron su vida colegial, comenzaban a vivir su propia adolescencia; años tiernos; muchos deseos y ansiedades y poca experiencia. La adolescencia es el momento cuando más necesitamos del apoyo de la educación. La adolescencia es en sí, lo que la palabra dice, adolece, falto de. La adolescencia es el joven que está creciendo. Y todo aquel que se encuentra en un proceso de búsqueda e integración, es un individuo frágil, dócil, que puede tomar un desarrollo entre infinitos desarrollos; un camino entre mil caminos6. Ellos tomaron el hermoso camino de la genuina solidaridad, no la de recibir o dar cosas materiales, en una mezcla de caridad y beneficencia, donde tantos sin escrúpulos se lavan la mala conciencia. La verdadera solidaridad es dar al otro el respeto que como ciudadano tiene, es enseñar al otro a conocer, a integrarlo, para que también sea partícipe en la transformación hacia una sociedad mejor; es dar a los demás esas cosas invisibles, que muchas veces son determinantes, como la actitud para la vida, amar tanto a ésta, que se está dispuesto a dar la propia. En pos de la misma; proyectar sobre lol demás los sentimientos internos, que son los humanos y la sensibilidad, para poder llevar de conjunto la gran tarea en común de un futuro pleno de posibilidades para las nuevas generaciones y, muchas veces, todo esto bajo regímenes y sistemas recalcitrantes, que te enseñan a no aprender y te desintegran.

Ellos era hijos de padres progresistas y comprometidos con las luchas sociales, que con gran cariño supieron encaminarlos por estos senderos de luchar por la justicia, no callarse ante los atropellos, y rebeldía ante las adversidades. El sistema caduco y corrupto te llena de miedos, te mantiene en el atraso y te estanca; el camino de la libertad y la militancia te cuesta la vida; ellos eran jóvenes pertenecientes a distintas organizaciones, ya sea Juventud Guevarista, Juventud Peronista, Juventud Comunista y Juventud Vanguardia Comunista. Pero supieron unirse en respeto y armonía, incorporararse a la UES -Unión de Estudiantes Secundarios-, y desde allí, lucharon por reivindicaciones para todo el colegio. En el momento de su detención, su actividad puntual era el problema del transporte. Estaban exigiendo para toda la ciudad la reducción del boleto estudiantil.

Ellos todo lo hacían con la fuerza de esa edad, con amor y enamorados, soñaban, y en sus tiernos labios tarareaban una consigna militante:

¡Decididos a luchar, destinados a vencer!

Ellos no vencieron, porque a los cuatro meses de haber sido secuestrados, fueron asesinados por esos militares fascistas.

Los adolescentes con su ejemplo nos enseñan que morir por una causa justa, como todos los caídos contra el fascismo, los convierten en mártires, por lo tanto, inmortales. Porque los mártires viven con nosotros, jamás nos abandonan, están aquí, en el pensamiento de cada momento, somos su domicilio estanco y el sentimiento de esta pertenencia involuntaria, es un sentimiento mezclado, casi contradictorio, que lo asocio con el exilio, es un castigo y, a la vez, un privilegio.

Notas:

1) Libro: ”Nunca Más”.

2) “Historia de la tortura y el orden represivo en Argentina” de Ricardo Rodríguez Molas.

3) “El Dictador” de María Seoane.

4) Ibis.

5) Ibis.

6) Ibis.

* Este artículo Mario Tenaglia lo escribió para presentar la película 'La noche de los lápices', presentada hace un mes en el local Victor Jara de Estocolmo. Esta película fue mostrada con motivo del vigésimo aniversario de las Abuelas de la Plaza De mayo en Argentina.

Fuente: Resistencia Digital

20090906

Día Internacional del Detenido Desaparecido


Por iniciativa de FEDEFAM (Federación Latinoamericana de Asociaciones de Familiares de Detenidos-Desaparecidos) el 30 de agosto se conmemora el Día Internacional del Detenido Desaparecido.

Esta fecha constituye un aporte al fortalecimiento de la conciencia mundial sobre la persistencia de la práctica de la desaparición forzada de personas -catalogado como crimen de lesa humanidad por la OEA y la ONU. Se inscribe, asimismo, en el trabajo que los organismos de derechos humanos realizan para influir en las políticas publicas nacionales e internacionales con el objetivo de prevenir toda forma de autoritarismo y consolidar la vigencia de los derechos y libertades.

En la última sesión del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (Ginebra, 29 de junio de 2006) se aprobó el proyecto de Convención internacional para la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas.

Marta Ocampo de Vázquez, Presidenta de Madres de Plaza de Mayo - Línea Fundadora y miembro de FEDEFAM y Horacio Ravenna, co-Vicepresidente de la APDH (Asamblea Permanente por los Derechos Humanos), participaron en representación de todos aquellos que promueven esta iniciativa desde hace 25 años.

47 países aprobaron el proyecto que deberá ser ratificado en la sesión ordinaria que el Consejo tendrá en el mes de septiembre.

20090903

SEPTIEMBRE NEGRO


Los vigésimos Juegos Olímpicos se hicieron en Munich, Alemania, en 1972. La tensión que rodeaba el evento en esta ocasión era muy alta porque era el primer Juego Olímpico con sede alemana desde que los Nazis organizaran los de Berlin en 1936. El equipo atleta israelita estaba especialmente nervioso, muchos de sus integrantes eran familiares de víctimas del Holocausto. Al principio todo parecía marchar con normalidad. Los primeros días pasaron sin sobresaltos. Sin embargo, la noche del 4 de septiembre, el equipo de Israel salió al teatro y volvieron tarde a la Villa Olímpica para descansar. Un poco después de las 4 de la madrugada, mientras todo el equipo israelita dormía, ocho miembros de la organización palestina “Septiembre Negro” saltaron la reja que rodeaba la Villa Olímpica, penetrando en el complejo de los deportistas.
Cerca de las 4:30 am, los palestinos encapuchados entraron en el edificio que alojaba a los israelitas, ocupando dos de las habitaciones. Al darse cuenta de la situación, algunos de los deportistas alcanzaron a escapar por la ventana, mientras algunos optaron por esconderse o luchar contra los terroristas. En este momento, dos israelitas fueron asesinados por las armas palestinas, mientras que el resto fue secuestrado, con un total de 9 rehenes. Para las 5:10 am, la policía alemana ya estaba al tanto de la situación y recibía las demandas de los secuestradores: que el gobierno de Israel liberara a más de 200 presos palestinos. Si bien los terroristas fueron alargando el plazo para la negociación, el gobierno de Israel se negó rotundamente a acceder a la liberación de sus presos. Luego de 12 horas de tensión, los secuestradores del Septiembre Negro comenzaron a darse cuenta de que sus demandas no serían satisfechas. Pidieron dos aviones para volar con los rehenes hacia El Cairo, esperando que allí oyeran sus demandas. Los oficiales alemanes accedieron tendiéndoles una trampa que los palestinos descubrieron fácilmente, gracias en gran parte a la transmisión televisiva que, a esa altura de las circunstancias, ya era de carácter mundial. Alrededor de las 10 de la noche, se pactó otro acuerdo y los secuestradores, junto con sus rehenes, fueron transportados en helicóptero hasta el aeropuerto, donde escaparían a Egipto. Pero los esperaba otra emboscada pobremente montada por la policía alemana: dos aviones que visiblemente no podían volar y un grupo de francotiradores principiantes. Nuevamente, los palestinos notaron que se trataba de otra trampa, pero en este caso los francotiradores comenzaron a disparar, ocasionando un tiroteo en la pista del aeropuerto donde dos terroristas y un policía murieron. Sin municiones, la situación se congeló durante una hora y media, tiempo en que tardó la policía alemana en reabastecerse. Cuando los autos y las armas para las fuerzas alemanas llegaron, el grupo de secuestradores supo que era el fin. Uno de ellos saltó a uno de los helicópteros donde mantenían cautivos a los deportistas israelitas y le disparó a cuatro de ellos. Luego les arrojó una granada. Otro terrorista, en el segundo helicóptero, usó su metralleta para matar a los cinco rehenes que estaban con él.
Los francotiradores y la policía mataron a tres palestinos más en un segundo tiroteo. Tres terroristas sobrevivieron el ataque y fueron llevados bajo custodia, pero tuvieron que ser liberados dos meses después, cuando otros miembros de la organización Septiembre Negro secuestró un avión y amenazó con volarlo si no eran liberados. La incapacidad para impartir justicia en el marco legal ocasionó una seguidilla de violencia y sangre entre palestinos e israelitas, desde bombardeos sobre Palestina, secuestros, asesinatos, hasta la operación “Cólera de Dios”, organizada por sectores gubernamentales israelitas para asesinar a los responsables del grupo Septiembre Negro. La planificación de estos objetivos fue retratada recientemente en la película Munich, dirigida por Steven Spielberg en el 2005. En cuanto a los Juegos Olímpicos de 1972, fue curiosa la decisión de no interrumpirlas a pesar de la masacre de Munich. Sólo se tomaron unos minutos de silencio por lo ocurrido, y las banderas hondearon a media hasta, todas menos la de Arabia Saudita, que se negó a guardar luto por las muertes del 5 de septiembre. La denominada masacre de Múnich tuvo lugar en la ciudad de Múnich, en el estado de Baviera (Alemania) el 5 de septiembre de 1972, durante la XX edición de los Juegos Olímpicos de verano. Ese día un comando de terroristas palestinos denominado Septiembre Negro tomó como rehenes a once de los veinte integrantes del equipo olímpico de Israel. El ataque condujo finalmente a la muerte de los once atletas israelíes, de cinco de los ocho terroristas y de un oficial de la policía alemana. La tragedia sería vista en todo el mundo a través de la televisión.

El asalto terrorista


El 4 de septiembre, los atletas israelíes habían estado disfrutando de una salida nocturna por la ciudad, antes de regresar a la villa olímpica. Hacia las 4:40 del día 5, mientras los deportistas dormían, ocho miembros del grupo terrorista palestino Septiembre Negro, vestidos con chandal y llevando pistolas y granadas en bolsas de deporte, escalaban la verja de dos metros que rodeaba el complejo. Fueron ayudados por deportistas del equipo estadounidense que desconocían su verdadera identidad y que creían que, como ellos, querían acceder furtivamente a sus apartamentos tras una noche de diversión. El entrenador del equipo de lucha, Moshé Weinberg, de 33 años, oyó un ruido tras la puerta del primer apartamento, observando que alguien abría ligeramente la puerta, se abalanzó sobre ésta dando un grito de alerta, mientras intentaba cerrarla forcejeando con los terroristas. En la confusión, nueve atletas pudieron escapar, y otros ocho se ocultaron. El luchador Joseph Romano, que en ese momento volvía de comer en un restaurante, agarró el arma a uno de los terroristas, pero resultó muerto por un disparo. Asimismo, Moshé Weinberg fue asesinado cuando intentó atacar a uno de los asaltantes con un cuchillo de fruta. Tras la muerte de éste, los terroristas tomaron como rehenes a nueve integrantes del equipo: David Berger, Ze'ev Friedman, Joseph Gottfreund, Eliezer Halfin, Andrei Schpitzer, Amitsur Shapira, Kahat Shorr, Mark Slavin y Yaakov Springer. Posteriormente se divulgó que los secuestradores eran fedayines palestinos de los campos de refugiados del Líbano, Siria y Jordania. Eran Luttif Afif (el jefe del grupo; tres de sus hermanos eran también miembros de Septiembre Negro, dos de ellos en prisiones israelíes), Yasuf Nasal, Afif Abmed Hamid, Khalid Jawad, Ahmed Chic Thaa, Mohammed Safady, Adnan Al-Gashey y su sobrino Jamal Al-Gashey. El grupo exigía la liberación de 234 palestinos presos en cárceles israelíes y dos más encarcelados en Alemania, así como su traslado seguro a Egipto. La respuesta de Israel fue inmediata y contundente: no habría negociación. Las autoridades alemanas, bajo la dirección del canciller Willy Brandt y el ministro del Interior Hans-Dietrich Genscher rechazaron el ofrecimiento por parte de Israel de enviar un grupo de fuerzas especiales de su país. La policía alemana que tomó parte en la operación, no contaba con entrenamiento especializado en operaciones de rescate de rehenes.

El fallido rescate


El plazo para la ejecución de los deportistas pasó de tres a cinco horas tras las conversaciones llevadas a cabo por las autoridades germanas. El jefe de policía alemán Manfred Schreiber y Ahmed Touni, que encabezaba la delegación olímpica egipcia, negociaron directamente con los secuestradores ofreciéndoles una ilimitada cantidad de dinero. Los embajadores de Túnez y Libia en Alemania también ayudaron intentando ganar concesiones de los secuestradores, pero fue inútil. Finalmente los terroristas exigieron un transporte para El Cairo. Las autoridades fingieron llegar a un acuerdo y, a las 22:10, dos helicópteros transportaron a los asaltantes y a sus rehenes a una base aérea en penumbra próxima a Fürstenfeldbruck, donde un avión Boeing 727 de Lufthansa les estaba esperando. Los secuestradores creyeron que estaban en Riem, el aeropuerto internacional cercano a Múnich. Las autoridades habían planeado un asalto sobre ellos en el aeródromo. Cinco francotiradores alemanes fueron seleccionados para disparar a los secuestradores. Ninguno tenía una preparación especial en este tipo de acciones y fueron elegidos porque practicaban el tiro de forma competitiva los fines de semana (posteriormente uno de ellos reconocería que no se consideraba un tirador de élite).[1] [2] En los 75 minutos que pasarían antes del fatal desenlace, las autoridades policiales germanas solicitaron tardíamente tanquetas, las cuales tardarían 30 minutos en llegar debido al denso tráfico. Los helicópteros aterrizaron a las 22:30 en el aeropuerto. A las 23:03, dos terroristas bajaron de los aparatos, caminaron hacia el avión y se volvieron. Seguidamente, otros dos descendieron empujando a dos de los rehenes, quienes llevaban sus manos atadas a la espalda. Viendo que el avión estaba vacío y sabiéndose engañados, los terroristas regresaron precipitadamente hacia los helicópteros. En ese momento el aeropuerto fue súbitamente iluminado con bengalas y focos y las autoridades alemanas dieron la orden de abrir fuego. Los cinco tiradores emboscados no disponían de radios para coordinar su fuego, y carecían de rifles de precisión y de teleobjetivos o dispositivos de visión nocturna. En el caos que sobrevino, dos secuestradores que estaban cerca de uno de los pilotos fueron eliminados. Otros tres terroristas se parapetaron detrás de los helicópteros, fuera del alcance de las luces, y comenzaron a disparar. Uno de los policías que estaba en la torre de control murió al alcanzarle una de las balas. Los pilotos del helicóptero lograron escapar, no así los rehenes, quienes permanecían atados brazos en alto al techo en el interior del aparato. A media noche, se exigió a los secuestradores que se rindieran. Cuatro minutos más tarde, uno de los terroristas saltó del primer helicóptero lanzando una granada a su interior, que explotó con cuatro atletas israelíes y un piloto en su interior. Antes de que el fuego de la primera explosión alcanzase el depósito de gasolina del segundo helicóptero, Luttif Afif y otro secuestrador salieron del aparato y comenzaron a disparar a la policía. Éstos respondieron a los disparos, abatiendo a ambos. Los rehenes del segundo helicóptero murieron durante el tiroteo (posteriormente se señalaría que fueron ametrallados por un tercer asaltante). Los tres terroristas restantes fueron capturados.

El impacto en los Juegos

Sorprendentemente, la competición olímpica solo se suspendió por un día, el 5 de septiembre, a pesar de que diferentes personalidades pidieron su suspensión. El presidente del Comité Olímpico Internacional, Avery Brundage, y otros miembros del COI decidieron que los terroristas no podían condicionar la celebración de los juegos. Al día siguiente se celebró en el estadio olímpico un memorial por los muertos al que asistieron 80.000 espectadores y 3.000 atletas. Avery Brundage no hizo ninguna referencia a los deportistas asesinados durante su discurso, en que elogiaba la fuerza del movimiento olímpico. Este hecho enojó a los israelíes y a mucha de la gente allí presente. Como muestra de duelo, durante el acto, la bandera olímpica se izó a media asta junto con la mayoría de las banderas nacionales de los países presentes en los juegos, a excepción de los países árabes, los cuales exigieron que sus enseñas ondeasen en lo alto del mástil. Las naciones árabes de donde eran los terroristas lo veían como una claudicación frente a Israel. El 5 de septiembre el equipo olímpico israelí anunció que abandonaba Múnich, siendo especialmente protegidos por las fuerzas de seguridad. El equipo egipcio dejó los juegos el 7 de septiembre, temiendo posibles represalias. Los familiares de las víctimas solicitaron al COI levantar un monumento permanente en memoria de los atletas fallecidos, pero éstos declinaron la petición, alegando que el hecho de hacer una referencia explícita a las víctimas podría enojar al resto de la comunidad olímpica.

(Fuente Wikipedia)